>Un caso judicial conmociona a la localidad bonaerense de Junín, donde una anciana fue engañada en el final de su vida y todos sus bienes quedaron en manos de los estafadores, quienes ahora deberán enfrentar un proceso en la Justicia.
>El escenario de los hechos fue un geriátrico de esa ciudad provincial, el Hogar Villa del Parque Junín, donde transcurrieron los últimos días de Delia Cassola, quien había sido internada en agosto de 2019 por María Isabel Módica, una de las personas ahora investigadas.

>l proceso judicial parte de la hipótesis de que Módica, junto con su marido en la estafa, llamado Carlos Morán –jefe de una seccional de AFIP-, obligaron mediante artilugios a Cassola a que firmara un testamento a su favor. Ahora, el juicio vigente busca declarar la nulidad de ese testamento “firmado” por la anciana.
>El expediente lo tramita el Juzgado Civil y Comercial N° 4 del departamento judicial de Junín. El testamento fue firmado en el geriátrico por decisión de Módica, sin dar aviso a sus familiares.
>“En reiteradas oportunidades Carlos Morán se acercaba al domicilio de Delia Cassola, insistiéndole en que le firmara papeles diciéndole que mientras ella viviera la casa sería de ella y él tendría un poder administrativo para cuidarla”, expresó un testigo.
>El “testamento” que Moran y Módica aportaron fue firmado por Delia Cassola en una hoja de servilleta en el geriátrico de Junín. Los hechos se vuelven más escabrosos cuando se constató que los vecinos del lugar nunca se enteraron dónde se encontraba Cassola, ya que Módica y Morán escondieron información sobre la anciana. Incluso cuando Delia Cassola ya había fallecido.
>Sus amigas y vecinos más cercanos se enteraron seis meses después de su muerte. Una estrategia, investiga la Justicia, para que su sobrina y única heredera desconociera su paradero y así ganar tiempo para quedarse con todos los bienes. Entre ellos, algunos inmuebles, y la totalidad de las pertenencias.


Fuente: https://www.minutouno.com/sociedad/enganan-una-jubilada-y-se-quedan-todos-sus-bienes-su-muerte-n6125331